En la forma de construcción y
evolución de las catacumbas podemos distinguir varios periodos:
- Galerías concatenadas con giros en ángulo recto, y siguiendo un esquema regular y generalmente creando manzanas rectangulares. Estaban totalmente organizadas y planificadas. Esta forma se da desde el inicio hasta mediados del siglo III.
- En forma de “espina de pez”: Se trata, como su propio nombre indica, de un crecimiento planificado en forma de espina de pez. Lo empezamos a encontrar en la segunda mitad del siglo III y los primeros años del siglo IV.
- La construcción de basílicas: Las catacumbas se convierten en lugares de enterramientos de mártires y de esta forma, se empiezan a construir basílicas en las mismas catacumbas.
En los tres periodos, estas se llenaban de nichos verticalmente por todas
las paredes, menos por aquellos puntos por donde se creía que podían crecer
posteriormente las galerías o bien crear otras ramificaciones.
Planta y sección de la Catacumba de San Callisto |
El crecimiento vertical se producía de forma que se
empezaba por las zonas altas (ya que eran las primeras a ser excavadas), y así
se corrobora en ellas: las inscripciones
más antiguas están en la parte más alta, y las más recientes en las más bajas.
Se excavó pues en primer lugar una galería un poco más alta que un hombre, y,
cuando estuvo llena de cadáveres, se duplicó la dimensión, excavando otro
tanto. Por último se excavó la parte más baja.
Se continuó excavando
bajo tierra debido al número inmenso de convertidos; se ocupaba el más pequeño
espacio, y fue entonces que se añadió un tercer piso, un cuarto y un quinto; no
se detenían hasta que el agua impedía pasar por delante (MONJE CISTERSIENSE REFORMADO DE LA
ABADÍA DE LAS CATACUMBAS, 1924, 35). Podían
llegar a alcanzar de esta forma los 20 metros de profundidad.
Arcosolio en Catacumba San Calixto de Roma |
- Arcosolio: Se trata de una tumba más grande con un arco encima del túmulo. La lápida era de mármol y se colocaba de forma horizontal, servía también de altar para el sacrificio en la misa. Podía contener dos o tres cadáveres.
- Sarcófago: Es un sepulcro de piedra o de mármol, ocasionalmente adornado con esculturas en relieve o con inscripciones[1]
- Forma: Son tumbas excavadas en el suelo de los pasillos, cubículos o galerías, pero esto sólo se da después de la paz de la Iglesia, a partir del siglo III.
Sarcófago |
Otros términos susceptibles de ser conocidos serán:
- Cubículo: El término significa “cuarto de dormir”. Era un espacio que albergaba varias lóculos de una misma familia, es decir, eran tumbas familiares. El cubículo estaba normalmente decorado con frescos con escenas bíblicas (Bautismo, Eucaristía y Resurrección). También encontramos arcosolios, que son igualmente decorados.
- Cripta: Se trata de una iglesia subterránea, con pinturas y mosaicos como decoración.
Hay que decir, que si bien estos tipos fueron usados durante toda su historia indistintamente, existen ligeras diferencias en cuanto a su estructura, dimensión, elementos arquitectónicos, decoración, etc. Por otro lado, si al inicio no había diferenciación por clase social, y todos los enterramientos poseían las mismas características, al final del periodo de uso de las catacumbas si podemos observar que en ciertos cementerios hay diferenciación de clases. Esto no significa que haya una forma diferente de enterrar, sino que algunas son “más lujosas”: más grandes, más decoradas, presencia de diversos materiales...
Lucernario de las Catacumbas de Priscila |
Las personas especializadas en la construcción de catacumbas fueron los fossores, ellos construían estos cementerios excavando en la tierra con un pico y una pala y una pequeña luz y cestos para llevar la tierra excavada a la superficie. Se sabe que estaban especializados porque todas ellas poseen las mismas características. Por otra parte, también eran los encargados de la decoración con frescos. Antes del siglo IV era una profesión que se pasaba de padres a hijos, más tarde, a partir del Siglo IV los fossores pertenecían a la jerarquía eclesiástica (eran del clero inferior).
BIBLIOGRAFÍA
DE SANTIS, LEONELLA. (2009): I segreti de Roma sotterranea. Roma. Newton.
FIOCCHI, V, BISCONTI, F, MAZZOLENI, D. (1999): Las catacumbas Cristianas de Roma: Origen, desarrollo, aparato decorativo y documentación epigráfica. Regensburg. Schnell & Steiner.
FIOCCHI NICOLAI, V. (2006): Origine delle catacombe romane. Atti Della giornata tematica del seminari di Archeologia Cristiana (Roma-21 marzo 2005). Roma. Città del Vaticano. Pontificio Istituto di archeologia cristiana.
NUZZO,D. (2000): Tipologia sepolcrale delle catacombe romane. I cimiteri ipogei delle vie Ostiense, Ardeatina e Appia. Oxford. BAR International Series 905
SÁNCHEZ RAMOS, ISABEL.(2006): “La Cristianización de la Topografía Funeraria en las Ciudades Occidentales: Corduba en la Antigüedad Tardía”. Anales de arqueología Cordobesa 17 / Vol II.
MONJE
CISTERSIENSE REFORMADO DE LA ABADÍA DE LAS CATACUMBAS (1924): Las catacumbas de San Calixto. Roma.
Escuela tipográfica salesiana.
WEBB, M. (2001): The Churches and Catacombs of early Cristian Rome. A Comprehensive Guide. Padstow. Sussex Academic Press.
[1]
Visto en el sitio de
las catacumbas cristianas de Roma, “Estructuras de las catacumbas”. http://www.catacombe.roma.it/es/descriz.html
+Marta Velazquez Rojas
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